A principios de año tuve el placer de publicar en el blog el artículo «La Extraordinaria Química de la Universidad de Oviedo», una de esas entradas que llenan de orgullo y satisfacción.
En ese artículo os comenté el inmenso honor que supone recoger el Premio Extraordinario de Doctorado en Ciencias, otorgado por esta magnífica institución académica.
«En el estudio de valoración de las titulaciones universitarias españolas en el año 2015, realizado por el diario El Mundo, los estudios de Química en la Universidad de Oviedo se encuentran en el quinto lugar a nivel nacional, por detrás de las Facultades de las universidades de Barcelona, Valencia, Zaragoza y el País Vasco».
Unos días más tarde, con el artículo Biología, Física, Geología, Matemáticas, Química… ¿qué Ciencia tiene más impacto? os acerqué el proceso de evaluación de las distintas candidaturas que se presentan desde los diferentes Programas de Doctorado en Ciencias a la hora de conceder el mencionado galardón.
Con ambos artículos se puso de manifiesto «La extraordinaria salud de la Química asturiana» y esto es justamente lo que he escrito en el artículo de divulgación publicado en la Revista del Colegio de Químicos de Asturias y León, al hilo de este premio y que comparto con todos vosotros a continuación.
Justo
«Ciencia Química en el siglo XXI» | Dr. Justo Giner