Hace algunas semanas se celebró en Oviedo una actividad de divulgación y popularización de la Ciencia, denominada “Ciencia en Familia”.
La idea era que los papás y las mamás pasáramos una tarde agradable haciendo experimentos muy sencillos con nuestros hijos pequeños (entre 3 y 8 años), bajo la supervisión de los científicos del Instituto Nacional del Carbón (INCAR-CSIC). Como os podéis imaginar, alli me fui sin dudarlo con mi hija Claudia.

¡Qué importantes y necesarias son las actividades de divulgación y popularización de la ciencia!
Alrededor de 60 niños acompañados de sus familias nos juntamos en las instalaciones del Instituto Nacional del Carbón. Sin duda, estas actividades contribuyen a generar un discurso público favorable a la ciencia, elevando su prestigio social y nuestra propia cultura científica. Muchos papás y mamás se marcharían a sus casas pensando “bueno, la ciencia no es una cosa aterradora o incomprensible“, quitando sus miedos y estoy seguro que algunos incluso profundizarían más sobre algún experimento que les llamó la atención.
“No es magia, es Química”

A sus 4 añitos, mi pequeña “Marie Curie” se lo pasó pipa con Ciencia en Familia.
La ciencia te atrapa, te motiva a pensar y a hacerlo con un pensamiento crítico. ¿Habrá conseguido despertar alguna vocación científica entre los más pequeños?
Justo
«Ciencia Química en el siglo XXI» | Dr. Justo Giner